Alma Seele Verre

El terrorismo en México es una realidad innegable. Los cárteles escalaron su violencia atacando ahora civiles inocentes.

El crimen organizado encontró, en los niños, el arma perfecta para vulnerar a la sociedad. La perversidad en el uso de infantes sicarios es un flagelo para nuestro país.

Obrador y varios miembros de su gabinete deben ser investigados y juzgados por desarticular el Sistema de Salud, lo que ocasionó la muerte de miles de mexicanos.

El gobierno que se eligió democráticamente en 2018 ha resultado ser populista, autoritario y hasta dictatorial, y aunque Andrés Manuel López Obrador ya vio que rechazamos la destrucción del INE, hará lo posible por perpetuarse en el poder.

Ahora que sabemos que Adán Augusto es parte de y/o está a la disposición del crimen organizado ¿habrá consecuencias legales o seguiremos consintiendo un Narco Estado?

La militarización, además de ser un infame atentado a la democracia y el Estado de derecho, nos ha distraído de otros graves problemas que azotan a México.

La salud mental de nuestros gobernantes debe ser un asunto de seguridad nacional. Aquél que no esté bien de sus facultades debería ser destituido.